martes, 26 de febrero de 2008

Álvaro Colom ofrece abrir archivos militares

Por Prensa libre
Con el fin de esclarecer el paradero de miles de guatemaltecos que desaparecieron durante el conflicto armado interno, el presidente Álvaro Colom ofreció ayer hacer públicos los archivos del Ejército, para que se haga justicia.






Víctimas del conflicto armado solicitaron
ayer a las
autoridades apoyo y atención integral a sus
problemas



“Lo habíamos prometido desde la campaña, pero ahora que ya sabemos dónde están —no especificó— y tenemos la información, les puedo asegurar que vamos a hacer públicos todos los archivos del Ejército”, dijo Colom, durante la conmemoración del Día Nacional de la Dignidad de las Víctimas, que tuvo lugar en el Palacio Nacional de la Cultura. Inmediatamente, autoridades castrenses dijeron que acatarán la disposición.

Las víctimas, que realizaron una marcha previa a la actividad, exigieron a las autoridades “dejar tanto discurso” y resarcir de una forma integral a más de 200 mil familias. La mayoría permaneció fuera del Palacio; sólo un grupo pudo ingresar.

Durante su discurso, el presidente, a quien se le quebró la voz, aseguró que su decisión “ya la conoce la cúpula militar”, y que realizará “todos los esfuerzos que sean necesarios para llegar a la verdad” de cada uno de los casos, porque reconoció que había sido responsabilidad del Estado la mayoría de violaciones a los derechos humanos.

Se buscará que a través de la Procuraduría de los Derechos Humanos se resguarden los documentos, como se hizo en el caso de los archivos de la desaparecida Policía Nacional.

El ex candidato presidencial Otto Pérez Molina afirmó: “En los archivos no van a encontrar que se haya ordenado o diseñado una operación en el período del conflicto armado para ir a matar a gente inocente, eso no va estar en ningún archivo; lo que podría aparecer es que se montó un operativo, para controlar a grupos insurgentes que andaban armados y estaban matando y amenazando a gente”. Consideró la medida como puramente política, que genera falsas expectativas.

“Yo perdí a cuatro familiares, pero ninguno de ellos era mi padre, madre o hermanos. Yo no sé de lo que hubiera sido capaz de haberlos perdido. (...) Por eso es importante que esos archivos se conozcan, y se pueda contribuir con las familias que todavía buscan respuestas”, destacó Colom.

Orlando Blanco, secretario de la Paz y de la Comisión Presidencial de Derechos Humanos, explicó que el presidente “es el comandante del Ejército” por lo que su orden será acatada por los militares.

“No sabemos cuánto tiempo se va a llevar. Nosotros vamos a ayudar en los procesos a las víctimas, canalizaremos las solicitudes de información para el Ejército”, dijo.

Anunció que efectuarán un recorrido por las distintas instituciones del Ejército, para verificar cuántos archivos se pueden confiscar. Se concentrarán en los años de 1979 a 1983, período en el cual la guerra interna recrudeció, refirió Blanco.

El general José Luis Quilo Ayuso, de la Asociación de Veteranos Militares de Guatemala, confía en que se respete el artículo 30 de la Constitución, el cual establece que los expedientes que se traten de asuntos militares o diplomáticos de seguridad nacional no pueden ser revelados.

No descartó que alguien presente una acción de inconstitucionalidad.

“No hay nada de lo que andan buscando. Tengan la plenitud que nada estará escrito, si existiera responsabilidad del Ejército”, afirmó Quilo.

MANUEL CASTILLO ASUME ALCALDIA DE JUTIAPA

Por Prensa Libre
Manuel de Jesús Castillo asumió la alcaldía de Jutiapa hace ocho días; nadie se dio cuenta, incluso pasó desapercibido para los elementos de la Policía, quienes supuestamente lo buscan para capturarlo, por su vinculación en la muerte de tres diputados salvadoreños y su piloto.

Eran las 20 horas, cuando los miembros del Concejo de la Municipalidad de Jutiapa hicieron una junta en el edificio de la comuna, donde se supone que trataban diversos temas.

Cuando estaba por empezar el punto séptimo del acta 09-2008 del 19 de febrero último, el Concejo fue interrumpido porque Castillo hizo su ingreso en el edificio de la municipalidad para tomar posesión del cargo de alcalde de Jutiapa por el período 2008-2012, a pesar de estar prófugo de la justicia desde enero último.

En el documento se establece que cuando entró fue recibido con aplausos de los presentes.

Según el acta, Castillo les presentó a los integrantes del Concejo la constancia extendida por el Tribunal Supremo Electoral donde consta su calidad de alcalde y la supuesta inmunidad que goza. En ese momento solicitó ser juramentado.

Mario Lizandro Salazar, alcalde interino, procedió a juramentar a Castillo, en presencia de los síndicos e integrantes del Concejo.

“Juráis, por vuestro honor de ciudadano, desempeñar con lealtad y patriotismo los cargos para los que habéis sido directa y popularmente electos... ser fieles a la Constitución... respetar y cumplir las leyes del país... habiendo contestado afirmativamente, le confirman sus cargos”, se lee en parte del punto séptimo del acta suscrita hace ocho días.

En dicha reunión estuvieron presentes Salazar, los síndicos Gloria Rosaura Sánchez Pineda, Carlos Mauricio Valladares De León y Jaime Estuardo Salguero Pineda.

También firmaron el documento los concejales Casimiro Méndez Olivares, Mario Roberto González Martínez, Adilio de Jesús Ramírez López, Francisco Vega Paiz, Henry Amílcar Flores Duarte, Édgar Humberto Laines Corado, Misael Armando Cambara Oliveros, Jorge Mario García Recinos, Sergio Salguero Ruano y el secretario Pedro Corado Ventura.

Coincidentemente, el martes 19 de febrero se recordaba el aniversario de la muerte de los parlamentarios salvadoreños Eduardo D’aubuisson, William Pichinte y José Ramón González, y su piloto Gerardo Ramírez.

Ayer todos guardaban hermetismo y preferían no comentar sobre la toma de posesión de Castillo.

“Sí, él estuvo el martes pasado, pero de eso es algo que no puedo opinar, porque el tema es muy delicado, no quiero problemas con nadie... tendríamos que hablarlo personalmente”, expresó García Recinos, uno de los concejales, después de que se le insistió sobre su firma en el acta.

Otros integrantes de la comuna aseguran que Castillo se presentó disfrazado, para que nadie lo reconociera; otros señalan que le dieron posesión porque él llevó la papelería que supuestamente aseguraba su inmunidad.

Álvaro Matus, fiscal de Delitos contra la Vida, comentó que no tiene detalles de lo sucedido, y que analizarán las acciones del Concejo, pues beneficiaron a un prófugo de la justicia.

Los elementos de la Policía asignados a la búsqueda de Castillo informaron que han mantenido constante vigilancia en el área, pero que no han observado nada fuera del orden, y que Castillo es fácil de reconocer.

Incluso dudan de que la sesión se haya llevado a cabo en la comuna, pues creen que fue una junta secreta.

Castillo es sindicado de los delitos de asociaciones ilícitas y encubrimiento, pues se negó a identificar al personaje conocido como Montaña 3, Alberto Gutiérrez Arévalo, quien ya fue detenido por la Policía.

El cruce de llamadas detalla que Castillo se comunicó con Montaña 3 y con algunas personas de El Salvador antes, durante y después del crimen de los parlamentarios.

Además, Montaña 3 se comunicó que los autores materiales de ese crimen.

MADRE RECUPERA A SUS HIJAS

Prensa Libre
La emoción colmó la sede de la Sala de Audiencias del Juzgado Tercero de la Niñez y la Adolescencia, a las 10.30 horas de ayer, cuando se conoció la resolución que devuelve a Míldred Alvarado sus dos hijas.

Míldred Alvarado sonríe junto a sus hijas, María Fernanda y Ana Cristina, en la sala de juegos de la Fundación Sobrevivientes.

Las niñas fueron raptadas en agosto del 2006 por una red de adopciones internacionales.

Ayer terminaron 20 meses de ininterrumpida lucha, durante los cuales Míldred Alvarado nunca perdió la fe de recuperar a sus pequeñas, María Fernanda, de 4 años, y Ana Cristina, de año y medio, que fueron secuestradas por una mafia de adopciones ilegales.

Míldred no pudo contener la lágrimas al mirar a los ojos, por primera vez, a su hija Ana, quien le fue arrebatada en el hospital donde la sometieron a una cesárea hace año y medio.

El encuentro se produjo en la Sala de Audiencias del Juzgado Tercero de la Niñez y Adolescencia, donde también volvió a ver a María Fernanda.

Las dos horas que duró la audiencia fueron una tortura, ya que Míldred no pudo acercarse a sus hijas y tuvo que soportar que el abogado contratado por la casa hogar Amor de María —donde se tenía ocultas a las niñas— asegurara que las pequeñas fueron entregadas voluntariamente por su madre.

Debido a la presión pública, la semana recién pasada, ese establecimiento informó al juez que tenía a las pequeñas, pero pidió que no se devolvieran a su madre.

En la sala de espera del Juzgado se encontraban los representantes de la Fundación Sobrevivientes y tres mujeres más que luchan, como lo hacía Míldred hasta ayer, por encontrar a sus bebés.

Gritos de alegría, besos y abrazos fueron la reacción espontánea de todos los presentes, cuando escucharon decir al juez que las niñas podían irse a casa.

La red de adopciones no solo engañó a la madre, sino también a la mujer estadounidense que iba a acoger a las pequeñas y que ya había obtenido el visto bueno de la Embajada de los EE. UU.

Hasta ahora han sido detenidas dos mujeres, acusadas del secuestro.

Míldred aseguró que ese era el día más feliz de su vida, y pidió a las autoridades que ayuden al resto de las madres que buscan a sus hijos.