PARÍS SE DESCONGESTIONA CON NUEVO PROYECTO DE BICICLETAS GRATIS

El Tour de Francia de este año puede haberse arruinado por escándalos de doping, pero el nuevo proyecto de bicicletas gratuitas de París ha provocado que el transporte de dos ruedas sea raramente popular en las calles de la capital francesa.
El programa "Velib," nombre corto para "bicicleta gratis," lanzado este mes en París, ha sido un éxito completo para el alcalde Bertrand Delanoe y ha permitido que miles de parisinos y turistas dejen sus autos en sus casas para pedalear hasta el trabajo u otros destinos.
Sistemas parecidos existen en otros países europeos y son un intento de las autoridades por reducir los embotellamientos de tráfico y la contaminación. Sin embargo, la capital francesa posee el plan más ambicioso de todos.
Unos 616 mil usuarios se han registrado para recibir bicicletas en más de 750 lugares de París, en subscripciones diarias que cuestan un euro.
"La gente ha empezando a hacer uso del servicio muy rápidamente. Estamos recibiendo alrededor de 1.200 pedidos de registro al día," sostuvo France Pele, del ayuntamiento de París.
Las resistentes bicicletas de color verde y gris pueden verse a menudo en la ciudad, dado que desde estudiantes hasta ejecutivos intentan sortear el tráfico con ellas. Incluso la leyenda de la pantalla grande, el actor Alain Delon, ha comenzado a utilizarlas.
"Es muy bueno. Realmente me gusta. Pese a haber dicho eso, no puedo hacer que esta cosa funcione ahora," sostuvo Roland Martinez, un vendedor que luchaba por dejar su bicleta en uno de los puntos establecidos por el ayuntamiento en los jardines de las Tullerías.
Es poco posible que París rivalice con ciudades clásicas para ciclistas, como Amsterdam. Pero el proyecto Velib es una revolución en una urbe con una extensa red de trenes subterráneos y con un sistema vial cada vez más atestado, donde por largo tiempo se ha mirado con sospecha al ciclismo.
Unas 10.000 bicicletas ya están disponibles y el proyecto tiene previsto duplicar la cantidad para fines de año, a fin de incluir cerca de 20.000 vehículos y 1.450 puntos de entrega, uno por cada 30 metros.
La primera media hora con la bicicleta es gratis, una medida que según los organizadores cubrirá el trayecto de la mayoría de usuarios. Los viajes más largos pueden ser cobrados en una escala de acuerdo al tiempo de uso.
También son posibles las suscripciones a largo plazo por más de un año.
El servicio no ha sido bienvenido por todos. Los conductores de taxis se quejan por el número de ciclistas que ciertamente hacen las calles más estrechas y los peatones a veces se ven obligados a esquivarlos cuando éstos suben a la vereda.
También ha habido problemas para mantener el equilibrio en los puntos de entrega, dado que muchos usuarios en zonas como Montmartre bajan por la ladera para ir a trabajar pero regresan en metro en lugar de subir con la bicicleta.
Sin embargo, las autoridades creen que los problemas serán resueltos.
"El operador probablemente necesita algunas pocas semanas para hacer un análisis sobre cómo algunas personas están usándolas y hacer algunos ajustes," indicó Pele.