PARTICIPACIÓN SUMÓ 47% EN SEGUNDA VUELTA

Por Prensa Libre
Desde primeras horas de la mañana se observó apatía en el electorado, ya que las calles estaban vacías, y lo más importante, los centros de votación se veían, prácticamente, desiertos; sin embargo, en el transcurso del día, la situación mejoró hasta llegar alrededor del 47 por ciento de la participación.

Por la preocupación ante la falta de votantes, algunos funcionarios invitaron a los ciudadanos a emitir el sufragio, sobre todo, en la provincia, donde se preveía ausentismo.

A las 22.30 horas se había computado el 97 por ciento de las mesas, y se determinó que la participación llegó al 47 por ciento, cifra similar a la registrada en el triunfo de óscar Berger, cuando votó el 46.8 por ciento de empadronados.

El magistrado del Tribunal Supremo Electoral (TSE) Raymundo Caz expresó su satisfacción por la asistencia a los centros de votaciones rurales —descentralización—, los cuales marcaron una fuerte participación. Ese registro contrastó con la apatía mostrada en las urnas urbanas.

Ambiente

En un recorrido efectuado en helicóptero por Prensa Libre se observó el ambiente en diversas regiones del país.

A las 7 horas, cuando se abrían las puertas de los centros, desde el aire se podía ver la escasa circulación de vehículos por las carreteras principales. Ni siquiera el clásico acarreo de personas en buses pagados o en camiones fue notorio.

En Santa Cruz del Quiché, Quiché, bajo un frío intenso, algunas mujeres indígenas, protegidas bajo sarape de lana, acudieron a las urnas a emitir su voto, los hombres, en cambio, brillaban por su ausencia.

Los presidentes de las mesas de ese municipio aseguraron que a las 8.30 horas apenas había 15 votos por urna, menos de la mitad que en la primera vuelta, pero la situación mejoró por la tarde.

Entre los ciudadanos se comentaba que, al parecer, el problema había sido el desinterés en la elección de presidente. Por la mañana, la apatía por la contienda era clara, incluso las sedes de los partidos políticos en pugna estaban vacías.

En Uspantán, los votantes comenzaron a acudir a los centros de votación a partir de las 8 horas. Y a algunos les llevó unas cuatro horas llegar hasta las urnas, como a Eulalia Pedro, quien viajó desde la aldea Campo Alegre a la cabecera del municipio.

Quienes sí acudieron a votar de forma masiva fueron los residentes en Cunén, donde el alcalde electo por la UNE, Domingo Camajá, organizó el transporte y comida para todos.

A orillas de la carretera vecinos se concentraron a comer el caldo de res. Desde las 2 horas, mujeres de la comunidad comenzaron a preparar la gran olla para unas mil personas. “Mataron un toro y gastamos tres arrobas de arroz y cinco quintales de maíz para los tamales", dijo Carolina López.

Para el politólogo de la Universidad Francisco Marroquín, David Martínez, la mediana participación se debió a que “no hay una conexión entre los ciudadanos y el Presidente de la República”.

Agregó: “El abstencionismo no es para arrancarse los pelos, es una acción racional del votante, que lo que quiere decir es, yo racionalmente decido no ir a votar, porque no me convencen las propuestas”.

En la capital se repetía la historia. Los representantes de las juntas receptoras de votos ubicados en los diferentes centros tenían la confianza de que los electores acudieran masivamente, después del mediodía, para mantener así los resultados de la primera vuelta, cuando registraron al menos 400 votos de 600 por mesa.

A las 18 horas, el conteo de las papeletas evidenció que la asistencia en promedio fue de entre 145 y 213 votantes.

Los municipios de Santa Catarina Pinula, San José Pinula y Fraijanes también mostraron una participación regular.

Proliferó la puesta de conjuntos de marimba, en casi todos los centros para motivar a las personas.

Había puestos de comida, y sobresalían las ventas de café, por las bajas temperaturas, que estuvieron entre los 16 y los 17 grados.

Se observaron jóvenes en la urnas, y algunos participaban como voluntarios en los centros.

Después del mediodía se notó que mejoró la participación de los electores, ya que el registro llegó alrededor de 47 por ciento.

En esos municipios no se observó que los partidos acarrearan votantes, por las estructuras débiles del PP y la UNE, ya que esos territorios los acaparó la Gran Alianza Nacional.

Los electores criticaron “la labor débil” del TSE para controlar las campañas negras y los ataques. También comentaron que ninguno de los dos proyectos políticos llenaban sus expectativas.

En las mesas electorales de Chinautla y San Pedro Ayampuc, las personas que asistieron no votaron en la primera vuelta.

Según Luis Linares, secretario ejecutivo de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, el abstencionismo se debe a que los simpatizantes de los partidos que no pasaron a segunda vuelta no encontraron otra alternativa que los atrajera para votar esta vez.

“Se tiene que achacar al bajo nivel de la campaña por parte de álvaro Colom, de la UNE, y Otto Pérez, del PP; cayeron en una serie de ataques que provocan el desencanto y frustración en los ciudadanos”, explicó Linares.

Los expertos consideran que la falta de debates y discusión de los planes de gobierno por parte de los dos candidatos influenció a que alrededor de la mitad de los empadronados no asistiera a las urnas.