"SISTEMA NO CAMBIA, HAY INTERESES PRIVADOS"

Presidente de RDC, que demandó al Estado por US$65 millones, se transportó en el último tren de carga
Por: Prensa Libre

Al frente de la locomotora 902, Posner III acompañó el proceso de cierre de operaciones de carga de Ferrovías. Foto Prensa Libre: Erlie Castillo.

El presidente de Railroad Development Corporation (RDC), Henry Posner III, llegó esta semana al país para iniciar el cierre de operaciones de carga de Ferrovías.

En la locomotora 902, el accionista mayoritario de Ferrovías, que maneja el sistema de trenes en el país, terminó ayer un viaje de tres días, desde la estación de Puerto Barrios a El Rancho, y luego hacia la capital.

Usando en el brazo izquierdo un pañuelo negro en señal de duelo, por el cese de operaciones, e interrumpido varias veces por el silbato del tren, Posner III, accedió a una entrevista con Prensa Libre.

¿Cuándo se cerrarán las operaciones de carga totalmente?

Los últimos vagones de carga estarán llegando a su destino entre lunes y martes de la próxima semana, aunque es muy difícil definir los últimos viajes. Para mí este fue el último tren con carga desde Puerto Barrios. Luego nos quedan movimientos de máquinas locomotoras; algunas, desde Zacapa.

Es un día triste, porque perdimos la oportunidad de contribuir a la economía del país en términos de costos, ambiente y seguridad vial. Pero lo más importante para el país es la percepción de Guatemala del inversionista internacional.

¿Qué percepción hay?

Es como lo que publicó The Wall Street Journal; es una injusticia que después de 10 años el Gobierno nos forzara a detener las operaciones, por intereses privados.

¿A qué intereses se refiere?

No puedo mencionarle nombres, pero es muy claro que las razones de la declaratoria de lesividad son los intereses privados que quieren el derecho de vía. En todo el mundo la vía es más codiciada que la operación del ferrocarril, y en el caso de Guatemala, es útil para distribución de electricidad y el uso de las estaciones del tren.

¿Hay interesados en manejar el sistema ferroviario?

No hay sectores interesados en manejar el tren, hay intereses en el derecho de vía; en este momento hay empresas privadas que la usan para distribución de electricidad y otros servicios, sin pagar. También se usa, sin pagar, como carretera industrial para camiones.

Al declararse la lesividad se ha eliminado la posibilidad de generar ingresos, porque no hay ninguna empresa interesada en la firma de un acuerdo.

Tras la suspensión de operaciones de carga, ¿ RDC se retirará de Ferrovías?

No. Tenemos a nuestro cargo proteger las máquinas y los bienes ferroviarios, y tenemos 60 accionistas guatemaltecos. Continuaremos como accionistas, y tenemos varios años para seguir el proceso de nuestra demanda de arbitraje internacional en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), para conseguir justicia.

¿Creen que puedan volver a operar el tren de carga en Guatemala?

Existiría la posibilidad de restaurar el servicio; sin embargo, el sistema no cambia, porque hay intereses privados y del Estado en el derecho de vía, que no nos van a permitir ser exitosos.

Yo soy un hombre que naturalmente tiene esperanza, pero no tengo esperanza en el sistema, y es que el Gobierno cambia, pero el sistema no. Eso no va a cambiar con el nuevo gobierno.

¿El sector azucarero estaría interesado en la ruta al Pacífico?

Históricamente hay conversaciones con todos los sectores, incluido el azucarero. El sector privado quiere que resuelva el negocio del ferrocarril, pero no hay acuerdos. Hay intenciones, pero las condiciones no se dieron.

El Gobierno los acusa de no haber habilitado las vías en las fechas que establece el contrato. ¿Qué opina al respecto?

Invertimos más o menos US$15 millones; existe la posibilidad de invertir más, pero en este momento no hay ambiente para invertir; necesitamos tener confianza en el sistema.

Posturas: Proceso

La empresa demandó al Estado por US$65 millones, por la declaratoria de lesividad contra el contrato de equipo ferroviario.


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