La factura petrolera de Costa Rica aumentó 8.2 por ciento en el primer semestre del año, con respecto al mismo periodo del año pasado, lo que equivale a US$52 millones, confirmó el viernes recién pasado una fuente oficial.
Datos de la estatal Refinadora Costarricense de Petróleo (RECOPE) indican que de enero a junio pasado la compra de combustibles alcanzó US$681 millones, lo que representa un alza del 8.2 por ciento con respecto a los US$629 millones registrados en el mismo lapso del 2006.
El consumo de derivados del crudo aumentó por algunas razones como la necesidad del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) de generar energía térmica debido a la escasez de agua que el país enfrentó durante el verano y el consumo de los automóviles.
El incremento del uso de combustibles surgió pese a que desde el 2005, las autoridades energéticas pusieron en marcha un plan para disminuir el consumo energético.
Este plan comprende algunas restricciones en la circulación de vehículos, la activación de medios de transporte alternativos como el tren y propuestas de ahorro eléctrico en las instituciones estatales.
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