Las autoridades de Guatemala informaron que rescataron 46 niños pequeños y recién nacidos que al parecer habían sido separados de sus padres biológicos para ser dados en adopción ilegal a extranjeros.
La policía guatemalteca indicó que agentes policiales y del ministerio público encontraron a los menores en una casa-cuna clandestina que operaba en la ciudad turística de Antigua, al oeste de la capital.
El lugar fue investigado después de que los vecinos reportaran haber visto a extranjeros recogiendo niños de allí todos los días.
Las edades de los niños rescatados oscilan entre tres años y tres meses.
Las autoridades pretenden determinar si los niños fueron robados o si a los padres se les coaccionó para que entregaran a los pequeños. Pero no hay pruebas fehacientes de que los niños hayan sido separados por la fuerza de sus padres.
Sin embargo, Asturias indicó que los archivos y los papeles de adopción de los niños parecen tener muchas inconsistencias, según informó la Procuraduría de la Niñez en Guatemala.
Custodia policial
Mientras se realiza la investigación, los menores permanecen en la casa bajo custodia policial.
La procuradora de Niñez, Josefina Arellano, indicó que la documentación de los menores es incompleta y que de ninguno hay trámites en tribunales.
Guatemala tiene una alta tasa de adopciones per cápita, ya que el procedimiento toma poco tiempo en este país, y resulta más barato que en otros.
El año pasado, más de 4.000 menores guatemaltecos fueron adoptados por parejas estadounidenses.
El robo de recién nacidos para venderlos en adopción ilegal es una de las actividades ilícitas que practican bandas de traficantes en ese país centroamericano; estas organizaciones pueden llegar a vender niños a extranjeros hasta por US$23.000.
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