TEMEN DECLARAR CONTRA HOMICIDA

Pandilleros cómplices atemorizan a testigos
El Ministerio Público tienen dificultad para procesar a Fredy Estuardo Torres, acusado de 18 crímenes, pues los testigos de esos hechos fueron amenazados por pandilleros presuntos cómplices del detenido.
Según los investigadores del Ministerio Público, los cómplices de Torres, alias Kaquitas, han amedrentado a testigos que presenciaron los asesinatos ocurridos en la colonia Cuatro de Febrero, zona 7 capitalina.
Los agentes de la Sección de Homicidios de la Dirección de Investigaciones Criminológicas (Dinc) explicaron que Torres es un pandillero desalmado de la Mara Salvatrucha.
Los archivos de la Policía dan cuenta de que el 9 de agosto del 2006, Torres asesinó a Marvin Ottoniel López Quintanilla frente a sus hijos, de 3, 5 y 7 años.
“Cuando capturamos a este pandillero, teníamos más de 10 testigos que presenciaron los distintos asesinatos; sin embargo, ahora todos se retractaron, por temor a represalias. Algunos nos han dicho que los pandilleros los han amenazado”, comentó un investigador policial

Extorsiones

Los investigadores policiales explicaron que el grupo de Torres se dedica a las extorsiones y a robar dinero a los pilotos del transporte urbano de la zona 7.
La mayoría de esa banda se encuentra libre y aún opera en los alrededores de la colonia Cuatro de Febrero.
En ese sector, han sido asesinados siete pilotos del transporte urbano durante este año. “Estos pandilleros se caracterizan porque a pesar de que los pilotos y las víctimas de robo ceden y entregan todos sus recursos, son asesinados”, comentó un agente del Ministerio Público.
La Policía informó que Torres cometía crímenes junto a Juan Ramírez Tegualán, de 26 años, alias Pin, pero éste murió baleado en una vivienda, el 2 de agosto del 2007.
Torres y Ramírez eran sindicados de haber ultimado a Javier Raúl Cordero, 20, en la colonia Cuatro de Febrero.
Un familiar de la víctima explicó a la Policía que prefería no hablar, porque le tiene miedo a Torres. “Él hace lo que quiere, mata a quien desea, y la Policía nunca hace nada”, señaló.
La Policía tiene un arma que, se cree, utilizó Torres en varios crímenes.
Los fiscales buscan evidencias científicas que vinculen a Torres a esa serie de crímenes, algunos cometidos por encargo.
Torres está detenido en la cárcel de El Boquerón, Santa Rosa. Está recluido en el sector “A”, luego de su traslado de Pavoncito, porque se temía que organizara una revuelta.
Él fue capturado por las fuerzas de seguridad el 9 de agosto último, en el Hospital Roosevelt, cuando llegó a tratarse una herida en el pie izquierdo.
Ese día, los investigadores hacían una averiguación de otro caso, pero Torres se puso nervioso e intentó escapar del área de urgencias del hospital.

Lo capturan en hospital

Fredy Estuardo Torres es un personaje que la Policía buscaba desde hacía medio año. Las pesquisas, las declaraciones de los testigos y un arma de fuego incautada respaldan a los investigadores, para acusarlo de 18 crímenes cometidos en contra de pilotos del transporte urbano y de víctimas por encargo.
Pero cuando menos lo esperaban, la Policía lo detuvo en el área de urgencias del Hospital Roosevelt. El día de su captura, Torres se había identificado con otro nombre, y de no ser por el cotejo de huellas dactilares, habría salido sin problema.